Un largo camino recorrido desde su primer contacto con los grandes maestros hasta el presente.

Esta muestra retrospectiva que inaugura el 8 de mayo en Galería Forma (Thames 1620, Palermo Soho), sintetiza el trabajo de su prolífica carrera con acento en los períodos más significativos de su producción desde los 90’ y hasta la fecha.
Formada en letras, Graciela Dietl se inicia en la pintura al óleo a través del coleccionismo y las antigüedades que rodearon su infancia. Su formación académica comenzó tempranamente con Horacio Blas Mazza, y Beatriz Finocchietti. Su paso por el taller del maestro Carlos Cañas fue determinante para afianzar sus conocimientos prácticos y teóricos para consolidar su impronta personal.


La serie de Los Angeles señala el comienzo de su trabajo profesional en los 90’ invitada por Galería van Riel. A partir de entonces, participó en la feria ArteBA, Arte Clásica, Centro Cultural Borges, Galería Lagard, Galería Huellas, Club Alemán, y otros espacios dentro del país y del exterior.
El año 2000 marca un cambio de siglo donde los acontecimientos se precipitan, la acción y el movimiento darán lugar a una nueva serie que entrecruza pasado y presente. Color y forma darán vida a los trenes de antaño, protagonistas de tantas lecturas y películas de época.

El catálogo de la muestra “Pintoras de Buenos Aires” realizada en Berlin, (Alemania en 2003) y prologada por el Arq. Alberto Bellucci hace hincapié en su trabajo:
“No le interesa a nuestra artista lo que esta alrededor de la máquina, ya sea la evanescencia sulfúrica de la Gare de Saint Lazare que obsesione a Monet o el paisaje tormentoso dentro del cual Turner hizo circular su negro monstruo de vapor. Para Dietl es la locomotora en sí la que se convierte en paisaje tormentoso.
En esta serie, Graciela Dietl tampoco quiere imitar las imágenes sino transmitir los sentimientos que de ellas pueden derivarse, sin ahorrarse la euforia del gesto y la inquieta alegría de poder hacerlo con un ritmo que se percibe sonoro y obstinado como el que marcan los rodamientos sobre las vías. Esto la emparienta pero también la diferencia del febril Boccioni, el memorable futurista que compartiendo una análoga exaltación de la velocidad y del dinamismo formal se ciñó sin embargo a una textura de superficies y a una continuidad de líneas mucho más clásica y a una composición más contenida.
La contención no es en Dietl un elemento esencial; le importan mucho más la intuición y el arrojo, y también el diálogo áspero entre blancos y negros como planos de aire y tierra, de opacidades y transparencias, de ruidos y silencios, de breves preguntas y medias respuestas. Los frascos y jarros de años recientes, que cimbreaban y se desmoronaban unos sobre otros, como faltos de sustento, se han trasmutado ahora en fragmentos de puentes y vías que se construyen dramáticamente, en busca de límite. Dos o tres obras primerizas de esta serie denotan esa transición que no es sólo temática sino también pictórica; se nota una mayor desenvoltura en el manejo de la línea, evidenciada como vector grueso que dirige la obra, y existe una cierta reducción cromática, con abandono de verdes, amarillos y azules en favor de blancos, negros, ocres y pardos sobre los cuales algún destello de rojo saturado o naranja, señala la energía de una línea, de una biela, de una chispa o, en todo caso, del corazón de la obra (y sin duda también el del artista).
Por todo esto, envuelta en la fértil inquietud de sus atmósferas densas de sombras, humos y fuegos, podemos afirmar -literal y metafóricamente- que la aventura plástica de Graciela Dietl marcha sobre rieles, a todo vapor”.
Alberto G. Bellucci
Director de los Museos Nacionales de Bellas Artes y de Arte Decorativo
Otro de los intereses de Graciela Dietl deriva en la serie de Motos, como transición a la abstracción. Algunas de estas piezas fueron exhibidas en el Museo Nacional de Arte Decorativo en 2008 con motivo de la exposición “Motos clásicas”.
Otros de los temas recurrentes son los paisajes, no como reflejo receptivo de la realidad sino su propia interpretación del ella, recortando y yuxtaponiendo planos de color que dinamizan la composición.


Legada la pandemia, el paisaje urbano da un giro. El tiempo se detiene e Imágenes despojadas e inertes se recortan en el cielo. Será también el comienzo de la experimentación sobre papel. Aquí la artista se transforma en alquimista logrando texturas y colores para plasmar la escena. Estas obras fueron exhibidas en Galeria Forma en 2022.
Cabe destacar, los premios y reconocimientos obtenidos por Graciela Dietl en salones nacionales y provinciales.
Con esta Impactante exposición, la Galería Forma, dirigida Por Mónica Cassini, celebra 50 años de trayectoria.
Retrospectiva de Graciela Dietl
Inauguración: Martes 8 de Mayo, 19 hs.
Clausura: 30 de Mayo
GALERÍA FORMA
Thames 1620, Palermo Soho, CABA
Miércoles a Sábado de 16 a 19 hs