Maurice Benayoun brindó una clase magistral en donde se ocupó de disipar miedos y alentar el vínculo arte-tecnología
El artista, curador y teórico del arte francés residente en Hong Kong, tiene más de 30 años de experiencia trabajando con nuevas tecnologías como medios para la creación artística. Desde Magenta estuvimos en la clase magistral que brindó recientemente en la Fundación Williams y te acercamos sus reflexiones sobre el rol del arte en la sociedad actual, el rol del artista, la inteligencia artificial y el vínculo con la tecnología.

Alejándose de los miedos que giran en torno a las nuevas formas de producción creativa, Benayoun —pionero en el uso del video arte, la realidad virtual, obras interactivas e inmersivas—, no solo desenmascaró las amenazas que se relacionan a estos nuevos medios sino que aseguró que “si las personas no se adaptan a las nuevas posibilidades, los cerebros se vuelven perezosos. Y, ¿qué artista quiere tener un cerebro así?”
A medida que como oyentes íbamos acercándonos a su recorrido profesional y los puntos disruptivos de su creación, descubrimos cómo Maurice es una de las constantes en este mundo en donde las modas, los especialistas y tecnologías mutan y se transforman. ¿Dónde está la clave? En su concepción del rol del arte. “La obra se debe adaptar al hoy, al tiempo y las condiciones en que va a ser creada”, confesaba el artista.

El rol del arte: preguntas y el uso de las posibilidades

En 1992, Benayoun creó AME: Art After Museum (El arte luego del museo) una colección de arte diseñada por artistas contemporáneos para la realidad virtual. En 1994 presentaba Big Questions (Grandes Preguntas) 12 instalaciones interactivas con realidad virtual. En 1995 The Tunnel under the Atlantic (El túnel debajo del Atlántico) un evento televirtual que unía a través de la web y realidad virtual el centro Pompidou (París) y el Museo de Arte Contemporáneo de Montreal (Canadá).
Si hay algo que llama la atención de las obras mencionadas son los años en que el artista las pensó, imaginó y realizó. Para Maurice el arte vive en un constante estado de renovación. Y lo interesante es descubrir qué es lo que va a permitir su evolución. “Al crear suelo cuestionarme qué es eso que puedo refrescar para hacer de una idea algo interesante y/o novedoso,” nos contaba.
La llave se encuentra, según el teórico, en las preguntas. Sus preferidas son: “¿Qué puedo hacer con las herramientas que hoy existen? ¿Qué me gustaría hacer más allá de ellas? ¿Qué necesito crear para poder llevar esas ideas a cabo?”
Al adentrarnos en su forma de ver el universo artístico, podemos llegar a comprender la visión que sus piezas proponen. “La definición de arte cambia constantemente, así como también las prácticas artísticas aceptadas”, afirmaba con una sonrisa en la cara.

El rol del artista: buscar, definir y detallar
Maurice Benayoun se considera una persona que vive en una constante búsqueda. Y es justamente así como concibe el desarrollo creativo. Búsqueda de nuevos referentes, de nuevas preguntas, de nuevas formas para transmitir y comunicar. “A los artistas hoy presentes, los invito a que siempre estén alertas, prestando atención a lo que otras personas estén creando. Hay cosas realmente únicas y tenemos la suerte de poder conocerlas desde cualquier lugar del mundo en el que estemos”, recomendó.
Al ser un referente dentro del mundo de los nuevos medios, Maurice se ha visto rodeado de prejuicios: “¿No debería el artista controlar la creación? ¿No debería ser él, y no una máquina, quien realice la obra? —nos contaba le han preguntado muchas veces—. (Y para él), es el artista, más allá del rol que tome la tecnología, el que se encarga de elegir, definir, detallar. El artista es la mente que propone la obra de arte en sí, y la dota de su significado.”
Para él, el desafío de la creación actual se encuentra en la cantidad de aspectos a considerar en el origen de una pieza.
“Hoy nuestro trabajo puede verse afectado por elementos externos a él. Por ejemplo, un video puede reaccionar a las emociones de su espectador, a sus reacciones, a lo que este vivenció antes de apreciarlo. Todo está mezclado y sucede al mismo tiempo. Y eso hace que el artista tenga que contemplar muchísimas variables de antemano. Es por eso que mi desafío personal es siempre preguntarme qué cosas puedo hacer que antes no podía; o qué puedo hacer para magnificar el efecto deseado.”
Maurice Benayoun
Inteligencia Artificial: un medio para crear
El pensamiento que propone que la Inteligencia Artificial (IA) va a reemplazar a los artistas, entre otras cosas, ha ido ganando popularidad. Para Maurice este es un delirio, “estoy asombrado de que la gente se haga este tipo de preguntas.” Ya que afirma que el proceso que el arte está atravesando en este momento, no difiere a la aparición de la cámara de fotos y la desaparición de los artistas dedicados pura y exclusivamente a los retratos. “Me animo a decir que sin la cámara de fotos, no hubiese surgido el impresionismo. No se hubieran dado las necesidades de explorar los paisajes de otra forma.”

“Lo que viene a cambiar la IA es la forma en la que se crea. Esta, queramos o no, es una herramienta terriblemente humana. En el sentido de que justamente no es una inteligencia natural, sino que es creada por el hombre, depende de él. Y por ende nosotros somos responsables de sus creaciones.”
Una noción clave para seguir su línea de pensamiento, es el hecho de que el artista francés no cree que exista una coincidencia entre el arte y la imagen. “El arte no es la imagen. Si no que mucho más allá de ella”, aseveraba. Entonces lo que explica es que el artista no está haciendo él con sus manos las imágenes, no las está dibujando, esculpiendo o pintando, sino que las crea a partir de otro elemento. “El artista es la mente detrás. Él es el único que lo hace posible.”
En el marco del programa Presente Continuo, una iniciativa de la Fundación Bunge y Born y la Fundación Williams, con la participación de Fundación Andreani–-, que busca poner en diálogo a artistas, científicos, tecnólogos, teóricos y equipos interdisciplinarios de todo el país, con artistas internacionales que están trabajando en temas de la cuarta revolución tecnológica como realidad aumentada, inteligencia artificial, medios locativos, bioarte y la edición génica; se lo invitó a Benayoun a dar un workshop intensivo, además de la clase magistral. En él se pusieron en juego distintos perfiles profesionales, distintas formas de pensar y vivir el arte. La cuál Maurice definió como una “experiencia inspiradora.”